En Cornellà se celebró, con actividades en los aledaños, el inicio del año chino, que este año es del gallo, y el Espanyol se le puso gallito al Sevilla, seguramente el equipo que mejor está jugando al fútbol en este inicio de campeonato. Los blanquiazules, en el que fue el mejor partido de la temporada, incluso en algunas fases bailó al más puro estilo tango al conjunto del argentino Jorge Sampaoli. Dicen que el fútbol es de los futbolistas y ayer en el verde se vieron muchos de calidad. El Espanyol ofreció su mejor imagen. Equipo e hinchada se jugaban mucho ante el conjunto hispalense y lo sacaron adelante con nota, aunque jugaran con uno más. El espectáculo no solo estuvo en el césped, sino también en las gradas donde la afición volvió a hacer la ola como en las mejores épocas.
Quique quiso dar confianza al bloque que ganó la semana pasada al Granada y desde el primer minuto le empezaron a devolver esa confianza ante un Sevilla que salió con cuatro defensas, aunque acumulando mucho talento en ataque. Y las cosas no podían empezar mejor para los blanquiazules. Tras un excelente pase en largo de Jurado, Piatti pichaba el balón para encarar el marco de Sergio Rico y al entrar en el área fue derribado por Pareja. Penalti y expulsión. José Antonio Reyes asumió la responsabilidad, engañó al Rico y, en medio de la celebración, pidió perdón a los aficionados sevillistas que estaban en la zona visitante. Ni en los mejores sueños se hubieran podido imaginar los espanyolistas este inicio, mientras que Sampaoli tenía que reorganizar el equipo dando entrada a Lenglet por Ben Yedder.
Las sensaciones eran positivas, pero no se podía olvidar que delante estaba un Sevilla que es la auténtica revelación y, posiblemente, el conjunto que mejor ha iniciado este 2017. Vázquez daba el primer aviso con un cabezazo desviado, mientras que Jurado tuvo el segundo. Un centro raso de Piatti a la frontal del área era rematado por el gaditano, aunque le salió demasiado centrado. Y, poco a poco, el conjunto de Samapoli empezó a ser el equipo que está dejando muy buenas sensaciones en la Liga. Nasri y N’Zonzi empezaban a mandar en el centro del campo y esto era una mala señal para los intereses del conjunto de Quique. Y los hispalenses no tardaron en demostrar su calidad. Una combinación entre Vázquez y Nasri descolocó a la defensa blanquiazul y este último asistió a Jovetic para que, libre de marca, empatara el encuentro.
El partido estaba bonito con llegadas a las dos áreas. Piatti no llegó por poco a un centro de Aarón, y Diego López sacó un remate cruzado de Jovetic a asistencia de Nasri. Nadie renunciaba al triunfo. El partido estaba abierto e igualado, pese a que el Espanyol estaba jugando con una más. David López intentaba sorprender a Sergio Rico con un disparo desde el centro del campo y Nasri lo volvía a probar después de un rondo en el centro del campo. Todo podía pasar. Y fueron los pericos los que llegaron mejor al tramo final. En los últimos cinco minutos encerraron al Sevilla en su campo. En el 41’ Gerard cabeceó ajustado al palo y más tarde Hernán y Jurado veían como sus remates eran desviados a córner. La afición rugía como en las mejores ocasiones y el equipo apretaba como nunca. Y en el descuento llegó el premio a esa insistencia. Una falta lateral lanzado por Reyes era rematada de cabeza por Marc Navarro al fondo de las redes. El canterano, en su segundo gol en dos jornadas, adelantaba a los pericos en el tiempo añadido.
La segunda parte empezó con la incertidumbre de si el Espanyol podría aguantar su renta ante un conjunto con mucha calidad y de qué solución encontraría Sampaoli. Pero si la expulsión les había hecho daño, el gol en el descuento les causó un impactó que el Sevilla no supo soportar y dio confianza al Espanyol. Gerard y Javi Fuego avisaban en los primeros compases de que no se conformaban; querían un tercer tanto para que no aparecieran los nervios. Los minutos pasaban y el técnico argentino ponía más pólvora, pero los de Quique seguían muy cómodos. Tenían el encuentro muy controlado. Y cuando se llegaba al ecuador del segundo tiempo, llegó la sentencia, aunque no pudo ser hasta la tercera. Primera Reyes remató al larguero, Gerard cazó el rechace, pero su remate fue sacado desde la línea de gol, y, finalmente, el centro de Marc Navarro lo remató el ‘7’ perico al fondo de las redes. Gran premio y un golpe casi definitivo para los andaluces que empezaron a acusar el desgaste físico y, prácticamente, ya no inquietaron más el marco de Diego López, mientras que los pericos buscaron el cuarto tanto. El cuarto no llegó, pero la imagen del equipo confirma que este grupo buscará plaza europea con casi total seguridad. Ganó el equipo, ganó la afición y también la cantera, ya que se acabó con 7 canteranos en el once.
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